¿Eres agua, tierra, fuego o madera? Las antiguas narrativas chinas ilustran la estructura del mundo, así como el universo completo, entrelazados por cinco componentes: agua, tierra, fuego, aire y madera.
Sin un equilibrio entre estos elementos, el desorden tiene la libertad de desplegarse a su antojo. Es imperativo considerarnos a nosotros mismos de manera análoga a los cinco elementos, ya que conforman los elementos esenciales de nuestro entorno y de múltiples realidades dispersas por los cielos.
Según tu signo del Zodiaco tienes un elemento de la naturaleza que te identifica; descubre su mensaje:
– AGUA
El elemento agua se asocia con individuos que mantienen una conexión profunda con sus emociones y las de los demás. Disfrutan participando en diálogos profundos, demostrando habilidades excepcionales para escuchar y empatizar. Transforman las emociones en formas creativas, ya sea componiendo música o creando arte visual. A menudo, su enfoque está más dirigido hacia las necesidades ajenas que a las propias.
– AIRE
Si te identificas con el elemento aire, posees una habilidad destacada para la comunicación. Utilizas cualquier medio disponible para compartir ideas significativas con los demás, siendo los más extrovertidos hábiles motivadores. Tu reflexión profunda y consideración cuidadosa de los pros y los contras antes de actuar revelan una personalidad que tiende a estar inmersa en pensamientos elevados.
– FUEGO
El elemento fuego es idóneo para aquellos que se perciben como seguros de sí mismos e imparables en su accionar. Alcanzan resultados significativos mediante el trabajo arduo y cautivan a otros con su carismático comportamiento. Se desenvuelven excelentemente en roles de líderes y motivadores, siendo capaces de inspirar a los demás con sus palabras. Su aguda intuición y capacidad para percibir detalles pasados por alto son notables.
– TIERRA
La esencia del elemento tierra es la más estable y concreta entre los cuatro. Aquellos que se alinean con este elemento pueden parecer más serios y racionales que otros. Mantienen firmemente sus creencias y muestran paciencia, sentido práctico y constancia. Su método de aprendizaje se basa en la acción y el deseo de hacer las cosas. Trabajan con meticulosidad, valorando la utilidad de los objetos sobre su estética, y son leales y verdaderamente tolerantes.